Una rutina de limpieza del hogar simple pero efectiva

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Cuando todos estáis en casa, sea trabajando o en clases virtuales, puede resultar un desafío hacer funcionar tu rutina para mantener la casa limpia. Sin embargo, puedes lograrlo con un plan y una lista de tareas que cubra los quehaceres diarios, semanales y mensuales. Si quieres algunos consejos para mantener tu casa impecable, nuestra rutina de limpieza del hogar está aquí para ayudarte.

Organiza tus días de limpieza

Comencemos con un resumen de las tareas que puedes hacer rápidamente cada día. La gran mayoría de estas son tareas que no deberían llevarte tanto tiempo:

• Barrer el suelo de la cocina
• Limpiar las superficies de la cocina
• Asegurarte de que los platos no se acumulen en el fregadero
• Hacer las camas
• Ordenar la ropa sucia en cestas
• Limpiar los hornillos/vitrocerámica de la cocina
• Vaciar el cubo de basura
• Tender la ropa —esta es una de las tareas que pueden hacer todos los miembros del hogar—. Cuando todos asumen una parte de responsabilidad, estarán haciendo su parte de la rutina para mantener la casa limpia.

Rutina de limpieza semanal: casa limpia y ordenada

La buena noticia es que realizar pequeñas tareas a diario facilitará todo en tus días de limpieza. Además, te dará tiempo para afrontar tareas más grandes, como aspirar los suelos, quitar el polvo, limpiar la cocina y los baños, etc.

Recuerda que puedes dividir las tareas entre los miembros de tu familia, para compartir los quehaceres y crear buenos hábitos en los más pequeños.

Esta es una lista de control de las tareas que puedes hacer semanalmente:

• Limpiar el polvo.

  
  

  El polvo se acumula rápidamente, en especial en las zonas cerca de la televisión, los zócalos y los marcos de las puertas. Quitar el polvo debería ser la primera tarea en tus días de limpieza, ya que corres el riesgo de que termine todo el polvo ensuciando el suelo.

• Pasar la aspiradora.

  
  

  La mejor manera de aspirar es ir de habitación en habitación.

• Limpiar la cocina.

  
  

  Mantener la cocina limpia después de cada uso es la mejor opción y hacer tiempo para una limpieza a fondo una vez por semana, es una muy buena idea. Esto implica quitar los objetos de las superficies y limpiar estas zonas minuciosamente, incluyendo los suelos. Al usar un producto antibacterial, recuerda siempre leer la etiqueta con las instrucciones del fabricante y chequear si este es apto para la superficie que vas a limpiar.

• Limpiar el baño.

  
  

  Una vez más, quita los objetos de las superficies y comienza a limpiar lavabos, los grifos, la bañera, los azulejos, la ducha, etc. Utiliza un producto especialmente fabricado para limpiar el baño y sigue siempre las instrucciones de la etiqueta. En los días de limpieza en los que te toca el baño, las tareas incluyen limpiar el váter. La lejía es ideal para eliminar bacterias de esta superficie, además dejará el inodoro limpio y reluciente. Recuerda utilizar guantes y asegúrate de seguir las reglas sobre lo que hay y lo que no hay que hacer al usar lejía.

Las tareas que hemos mencionado son las principales a la hora de comenzar con tu rutina de limpieza de la casa; pero puede que necesites realizar algunas tareas más a menudo que otras. No te olvides de limpiar los espejos, los pomos de las puertas, lavar la ropa de cama y todas las partes pequeñas de la casa también.

Rutina de limpieza del hogar: plan mensual

Así como el orden y la limpieza regular pueden facilitar tus tareas, mantener un plan de limpieza semanal te ayudará a hacerle frente a los quehaceres mensuales de una manera más fácil. Algunas de las tareas que puedes incluir en tu rutina mensual incluyen:

• Lavar los textiles del hogar, como las cortinas o los cobertores de las almohadas, etc.
• Lavar a fondo los cubos de basura
• Limpiar los marcos de las ventanas
• Limpiar los portalámparas y pantallas
• Limpiar el lavavajillas y la lavadora (en particular los sellos)
• Limpiar la nevera y el congelador a fondo
• Limpiar la cocina.

La clave para una limpieza efectiva es crear una lista de tareas y marcarlas una vez que las hayas completado; en especial las tareas más grandes del plan de limpieza semanal o mensual. Si continúas con tus tareas diarias regularmente, esto tendrá un efecto positivo en la limpieza de tu hogar.

Comienza realizando una inspección del hogar, anota qué tareas necesitas realizar y con qué frecuencia y así tendrás tu horario de limpieza de la casa listo. Cuando sea posible, haz que todos se involucren en las tareas. Todo lo que tienes que hacer es armar tu rutina de limpieza del hogar.